El Ministro de Salud destaca, además, la creación de un área de planificación estratégica para proyectar el sistema sanitario hacia el año 2030 y la unificación de los registros digitales hospitalarios.
03-POLITICA-9
A solo nueve días de haber asumido la titularidad en el Ministerio de Salud, Emilio Lanari se muestra con una agenda cargada y una visión clara sobre el futuro sanitario de Corrientes.
Con la experiencia previa en la Salud municipal, el hematólogo y ahora Ministro busca imprimir un sello de modernización y eficiencia en una cartera que demanda respuestas inmediatas ante la complejidad del contexto actual. Por ello, el ex Viceintendente capitalino dialogó con el programa Una Palabra, conducido por el periodista Rubén Duarte e Inés Bobadilla y que se emite por LT7 Radio Corrientes.
A continuación, el desarrollo de la entrevista.
Ministro, ha mencionado cambios necesarios en la estructura del Ministerio. ¿Hacia dónde apunta esta nueva organización funcional?
-Efectivamente, vamos a implementar cambios que consideramos fundamentales. Lo más importante es la creación de una Dirección General de Evaluación, Planificación y Modernización, que dependerá directamente del Ministerio. Necesitamos un área que se dedique exclusivamente a pensar, a analizar indicadores y a proyectar el futuro. No podemos estar solo sumergidos en la urgencia diaria; alguien debe estar abstraído de la tarea cotidiana para mejorar los procesos y digitalizar el sistema. Actualmente, conviven cinco sistemas distintos en nuestros hospitales, y el objetivo que nos marcó el Gobernador es la unificación y modernización total para cumplir con las metas del 2030.
Uno de los pilares que usted destaca es la Atención Primaria de la Salud (APS). ¿Cómo planea fortalecerla, considerando la dificultad histórica de atraer especialistas a esa área?
-La APS será uno de los ejes centrales. En salud pública, el sistema debe ser inverso a la preferencia tradicional del médico por la ultraespecialización hospitalaria. Debemos fortalecer el control de enfermedades crónicas no transmisibles como la diabetes y la hipertensión, pero también dar un impulso renovado al área de salud sexual y reproductiva. Estamos viendo con mucha preocupación un aumento significativo de enfermedades de transmisión sexual; llegan madres al hospital materno-neonatal con sífilis y HIV por la pérdida del cuidado en las relaciones. Vamos a poner el foco allí, especialmente en la población adolescente.
COMPARATIVO
En el ámbito clínico, recientemente se analizó el caso del chef Christian Petersen y el impacto del estrés. Como médico, ¿cuál es su visión sobre este «mal de época»?
-El estrés mata a través de mecanismos conocidos: hipertensión, cardiopatías y alteraciones neurológicas. En Medicina lo vemos mucho con el burnout o el «cerebro quemado» en profesionales sometidos a tensiones extremas. Sobre el caso que mencionás, si hubo un ascenso rápido a la montaña sin preparación, el cuerpo sufre por la falta de oxígeno, lo que puede derivar en un fallo multiorgánico. Es un cuadro de extrema gravedad donde empiezan a fallar corazón, pulmones y riñones, algo que los terapistas están habituados a enfrentar, pero que requiere una recuperación muy lenta y compleja.
Hablando de infraestructura, hay obras emblemáticas pendientes. ¿Cuáles son las prioridades para el próximo año?
-Durante las gestiones de Gustavo Valdés y Ricardo Cardozo se avanzó muchísimo en infraestructura, pero el desafío ahora es que esas obras no sean «cáscaras vacías». Mi gestión se enfocará en llenar esos espacios con el personal adecuado: médicos, enfermeros, bioquímicos y kinesiólogos. En cuanto a lo edilicio, la prioridad es terminar la ampliación de los quirófanos del hospital Escuela e iniciar las obras en su guardia. También proyectamos el traslado del Laboratorio Central y la construcción de una torre de servicios múltiples para transformar el Hospital de Campaña en un hospital clínico quirúrgico generalista que apoye al Oncológico.
En las últimas semanas, se habló de la circulación de la variante H3N2 de la gripe. ¿Qué tan preocupados debemos estar los correntinos?
-Es una variante de influenza con mucha contagiosidad que ya afecta a Europa y seguramente tendrá un alcance masivo aquí también. Los síntomas son fuertes: mucha tos, dolor de garganta y malestar general. La buena noticia es que la vacuna anual otorga inmunidad cruzada y la mortalidad no es mayor que la de una gripe común. El consejo es claro: volver a las medidas que aprendimos con el Covid-19, como el lavado de manos, ventilar ambientes y, si uno tiene síntomas, aislarse para no contagiar.
Contra movidas antivacunas
El calendario de vacunación ha estado en el centro del debate por la aparición de casos de coqueluche y sarampión en el país. ¿Cuál es la situación actual?
-Es doloroso que hoy mueran niños de coqueluche en Argentina por esquemas incompletos. Hay vacunas disponibles en toda la provincia, tanto de Nación como de Provincia. Hemos notado un aumento en las consultas y en la aplicación de dosis en la última semana, lo cual es positivo. No debemos dejarnos influenciar por movimientos antivacunas; el calendario debe cumplirse estrictamente para proteger a los menores de dos años y a los mayores de 65.
PERSPECTIVA
Por último, Ministro, se acercan las fiestas y el fin de año suele ser un momento de balances. ¿Qué mensaje le deja a la comunidad?
-Mi deseo es que estas fiestas sean un momento de reencuentro familiar y reconciliación. Desde lo sanitario, pedimos moderación: comer de forma equilibrada, hidratarse bien y evitar los excesos que terminan en guardias hospitalarias. Estamos haciendo un esfuerzo económico grande para ordenar las cuentas del Ministerio en un contexto de suba constante de medicamentos. A pesar de las dificultades, tengo una mirada optimista hacia el futuro de Corrientes y del país.